Julio, 1993: Oportunidades de ahorro de energía eléctrica en la industria de las bebidas carbonatadas

De reciente aparición, el FIDE cuenta ya con un folleto sobre «Oportunidades de Ahorro de Energía Eléctrica en la Industria de Bebidas Carbonatadas».

Una de las industrias más importantes en el país es el de las bebidas carbonatadas, también llamadas refrescos. El proceso de fabricación de estos productos, requiere grandes cantidades de energía térmica y eléctrica. Esto representa una considerable fracción de los costos totales de producción.

Del total de empresas del ramo se escogieron cuatro, cada una con diferente capacidad. Aunque sus procesos productivos son similares, tienen diferentes consumos específicos de energía eléctrica, térmica y de agua.

Una vez que se realizaron los diagnósticos energéticos en cada una de ellas, se detectaron cinco áreas de potencial para el ahorro de energía eléctrica: control de demanda, refrigeración, sistemas de aire comprimido, iluminación y sistemas de bombeo.

También con los diagnósticos, se determinaron potenciales considerables de ahorro para la parte térmica. De acuerdo con la evaluación, las medidas de ahorro de energía más significativas resultaron ser de tipo eléctrico con potenciales de ahorro que van del 28 al 35 % en el control de demanda, hasta 0.5 y 3% en la iluminación.

Para obtener un estudio completo y real, se estimó la inversión y el período de recuperación de cada una de las medidas que conforman la estrategia de ahorro, que incluyen, entre otras, la corrección del factor de potencia, el mantenimiento del equipo de bombeo y la carburación de los generadores de vapor, siendo algunas de ellas de recuperación inmediata ya que su inversión resulta ser nula.

Al aplicar las medidas de optimización de la energía eléctrica, se pueden llegar a obtener ahorros que vandesde8%hastael46%enalgunas plantas. Con esto, los índices energéticos se reducen y permiten aumentar las utilidades y la competitividad de las empresas.

Finalmente, gracias a la aplicación de los diagnósticos energéticos, la publicación concluye afirmando que la industria embotelladora es un campo ideal para la aplicación de proyectos de cogeneración.